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21 de noviembre de 2006

Integrando las TIC en el proceso de negocio

Normalmente no soy muy amigo de las cadenas de fast-food, pero a mi hija le encantan esos regalitos incomprensibles que dan con los menús infantiles y, de vez en cuando, cedemos a sus peticiones y le damos el gusto de comerse unos palitos de goma aromatizados al pollo.

La semana pasada fue uno de esos días, así que partimos hacia el centro comercial esposa, niña grande, carrito, niña bebé, bolsas de las compras y marido rumbo a la consabida cola de un sábado por la tarde en el "restaurante" de turno. La cola era especialmente grande, supongo que porque coincidía con la hora de entrar al cine, así que después de pelear por una mesa, dejo a la familia sentada y me voy a la cola armado de paciencia recitando el pedido para que no se me olvide.

Mientras estaba esperando, se me acerca una chica vestida con el uniforme de la cadena correspondiente y me pregunta qué voy a querer. La miro, miro a las cajas y veo que me separan por lo menos 10 metros de cola, me la vuelvo a mirar y le digo

-- ¿cómo?

-- Que qué va a pedir, me dice mientras sujeta una extraña PDA envuelta en una protección de goma.

Le canté el pedido y ella lo fue entrando muy agilmente en la PDA dando golpecillos en la pantalla con el lápiz de plástico y cuando terminó me dio ¡un post-it! con un número apuntado a boli y el precio total de mi pedido.

Cuando me llegó el turno en la caja, le di el post-it al chico, que puso todo mi pedido en una bandeja, me cobró y me fui pensando... "esto tengo que escribirlo en el blog".

Si ya las cadenas de comida rápida suelen ser un ejemplo de agilidad en la entrada de pedidos, siempre se les acumula más gente de la que quisieran frente a la caja mirando esas grandes fotografías de hamburguesas y tratando de decidir entre tantas y tantas posiblidades. Cuando el cliente ya está decidido, van y te preguntan "las patatas las quiere con salsa barbacoa o grandes?" y ya te dejan unos segundos más pensando para decidir.

Con la anticipación del pedido, aprovechan el tiempo que estás en la cola para que te lo vayas pensando y luego frente a la caja no piensas: pagas y te vas, que al fin y al cabo esto es un sitio de comida rápida, ¿no?

Han agilizado, mejorado y rentabilizado un proceso de negocio claro como es el de la recepción de pedidos utilizando las TIC de una forma ingeniosa.

¿Ha sido el negocio quien lo ha pedido, o ha sido IT quien lo ha propuesto? Sea como sea, esto no es sólo alineación de las TIC con el negocio, sino que es un ejemplo de esto que tan de moda está ahora mismo: integración de las TIC en el proceso de negocio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

un buen ejemplo de alineamiento negocio-IT. Venga de dónde venga, creo que lo fundamental es trabajar en que la gente de negocio y la de TI se entiendan, y se conozcan cada vez mejor. En el entorno en que me muevo (telco), las areas de negocio saben mucho de sistemas, y nosotros sabemos mucho de negocio, y es en los momentos en los que salta esa química entre los dos lado cuando se hacen las cosas más interesantes.